miércoles, 12 de febrero de 2014

BREVERISMOS. MIÉRCOLES 12 DE FEBRERO DE 2014

Nos hemos levantado muy tarde, ya que anoche nos acostamos a las tantas. La razón fue que hicimos amistad con un grupo de manifestantes anti-Coca-Cola, y nos llevaron, Puente Carlos arriba, Puente Carlos abajo, a todos los bares que estaban abiertos a esas horas. Y, como era de suponer, surgieron los gin-tonics… y surgirán, al menos hasta que la tónica Schweppes no haga lo que Coca-Cola y tengamos que boicotearla también.
       Esta mañana Natalie se ha puesto así de guapa, con esa peluca color rosa fosforito, para ir a ver el Reloj Astronómico.


       Ya en la plaza, delante del reloj, que está instalado en la pared sur del ayuntamiento de Praga, Natalie me explicó que en 1410, el relojero Nikolas de Kadan y el matemático y astrónomo Jan Sindel elaboraron el mecanismo del cuadrante astronómico, que es la parte más antigua del reloj.

 

Ochenta años después, en 1490, el mecanismo del Reloj Astronómico –el más famoso y precioso-preciso de Europa- fue construido por el maestro relojero Hanus y su ayudante Jakub Cech. Cuenta la leyenda que las autoridades municipales de Praga, celosas de que el relojero pudiera construir un reloj semejante en otra ciudad, lo cegaron. En venganza el ayudante subió hasta el reloj y metió la mano en las ruedas dentadas, estropeando el mecanismo… y perdiendo la mano al mimo tiempo.


       Después le añadieron las esculturas que lo decoran, y muchos años después el calendario. Natalie, al ver que estaba un poco distraído, me dijo:
       -Escucha, desgarramantas, que te lo voy a explicar muy bien: el reloj está formado por tres partes importantes, que son, el cuadrante astronómico, las figuras y el calendario circular.

 

       El cuadrante astronómico, además de señalar las horas del día, presenta las posiciones del sol y de la luna en el cielo, junto al anillo con los signos del zodíaco y el anillo de rotación. Desde que amanece hasta que anochece, el mecanismo está en movimiento continuo indicando las posiciones del sol y la luna.


 

       Las figuras incluyen el llamado Paseo de los Apóstoles, que muestra las figuras de los 12 apóstoles cuando el reloj da las horas. Pero las que despiertan mayor interés son las figuras animadas que representan a la Vanidad, que es un hombre con un espejo en la mano; la Avaricia, un comerciante con su bolsa de monedas en la mano; la Muerte, con la guadaña y el reloj del Tiempo y la Lujuria, representada por un príncipe turco tocando la mandolina. Y entre las 9 de la mañana y las 9 de la noche las figuras toman vida y se mueven.

 

       El calendario circular tiene 12 medallones pintados y dorados que representan los meses del año. Fueron ejecutados por el pintor checo Joseph Mánes. Este calendario le fue añadido al reloj en 1880.

       -Bueno, ¿qué te ha parecido? –me preguntó Natalie. Y yo no contesté porque me había quedado congelado, ante lo cual mi amiga, frotándome para que reaccionara, me espetó: -¡Cómo te pones, total por 12 grados bajo cero! Y añadió:
-Ah, se me olvidaba. Como una muestra más de la barbarie humana el reloj fue víctima de la II Guerra Mundial. Sufrió grandes daños los días 7 y 8 de mayo de 1945, justo al final de la guerra, horas antes de la capitulación nazi en Praga, ante el avance del Ejército Rojo. El ayuntamiento y edificios cercanos fueron incendiados, sufriendo el reloj grandes desperfectos, entre ellos la parcial destrucción de las esculturas de madera y la esfera del calendario. Afortunadamente, fue restaurado y vuelto a poner en marcha en 1948.
Y Natalie, para terminar, dijo, graciosa ella:
-Anda, Quinito Quinito,
vamos a tomar un vino calentito,
y publica de una vez los Breverismos de hoy
o cojo la maleta y de Praga me voy.


Breverismos relojeros 2


3281)  RELOJ DE ARENA
Se sentía cada día más joven desde que le regalaron aquel misterioso reloj de arena en el que la arena, en lugar de caer, ascendía.

3796)  CUCO SALVAJE
Sucesos: seis soldados suizos heridos por el ataque del cuco de un reloj.

5930)  RELOJ BIOLÓGICO
El relojero se enfurecía al no poder controlar los mecanismos de su reloj biológico. Y más se enfureció cuando se paró.


Mañana, de vuelta en casa, más tranquilito, a ver qué se me ocurre.

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